16/11/09

La Práctica Efectiva


Vuelta a los libros mencionados en el post anterior. La verdad es que hay mucha similitud entre ellos. Los dos citan algunas de las mismas investigaciones aunque no llegan a exactamente las mismas conclusiones.

Una de las conclusiones a la que llega Geoff Colvin es que "el capital financiero es fácil de conseguir" - creo que no ha vivido en España :-) - pero que el auténtico recurso escaso es "capacidad humana". Para él la noción de "talento innato" es, si no falaz, por lo menos, y a efectos prácticos, irrelevante. Es irrelevante, según su idea, porque aún en los casos de aparente genio (como el muy citado caso de Mozart) hay otros muchos factores más importantes a tener en cuenta. Uno de ellos es la "práctica deliberada".

Central a este "concepto" es la idea de que repetir no es lo mismo que practicar. Todos los que hemos aprendido algún instrumento musical sabemos la diferencia entre tocar por el placer de tocar, hacer música junto con amigos y practicar específcamente aquello que nos va a llevar más allá de donde estamos. "Practica con las manos y te costará todo el día" dijo el gran violinista Auer, "practica con la cabeza y te costará hora y media o dos horas."

Comenta Colvin con cierta ironía "menos mal que hora y media es suficiente por que practicar con la cabeza cuesta".

Cuando yo vivía (o intentaba vivir) de la música, solíamos decir que para llegar a ser muy buen instrumentista "todo es cuestión de saber qué practicar". Diría ahora que es más una cuestión de saber qué practicar, cómo y por qué.

La serie de talleres "El Arte y la Ciencia de la Práctica Efectiva" responde a esta cuestión. Si quiero ser bueno haciendo terapia, innovando, gestionando el cambio, gestionando las emociones, meditando, haciendo hipnosis, viviendo en sistemas y un montón de cosas más - ¿qué conviene practicar, cómo y por qué? Desde luego que no es fácil, ni mucho menos simple. Sencillo - puede que sí. Tampoco es cierto (como afirman tanto Colvin como Anders Ericsson) que es necesariamente desagradable y poco divertido.

Ha habido muchos intentos de empaquetar de forma más o menos misteriosa la efectividad en diferentes áreas. Que yo sepa ninguna hasta ahora ha ido mucho más allá de teorías o técnicas. La metodología DBM, en cambio, ofrece una manera sistemática de combinar la ciencia - investigación rigurosa, exploración experimentación verificar, falsar e ir más allá - con el arte de hacer creativamente algo que merezca la pena con los resultados para identificar y desarrollar las "mejores prácticas" y aprender a ser tu mejor profesor.

Una de las aplicaciones declaradas de la DBM es ayudar a hacer mejor cualquier cosa que hagas. Es ambiciosa - pero constatable.

2 comentarios:

Pilar Mamolar dijo...

Tiene mucho interés la cuestión de practicar y el qué. Hace tiempo me diagnosticaron una pequeña lesión en las lumbares, la cosa no era seria, pero sí me impedía hacer determinado tipo de ejercicio. Tuve varios episodios de lumbalgias a los que equivocadamente respondí con más reposo mientras iba añadiendo más lumbalgias y más dolor. Eso hasta que di con un buen fisioterapeuta que me enseño a hacer determinado tipo de ejercicio. Me explicó en concreto en que consistía la lesión y específicamente los ejercicios a practicar, entre ellos abdominales, que por lo visto "sostienen" las lumbares. Llegué a practicar hasta hacer muchas, muchas "abominables" al día. Así fue la cosa hasta que en el gimnasio vi a una entrenadora haciendo algo parecido a lo que yo hacía pero en mucha menor cantidad y con mucha más gracia. ¿Cuantas de esas? Le pregunté. No podría hacer más de 20. ¿Veinte? Le digo. Sí. Si las haces bien no necesitas hacer muchas, el truco está en saber hacerlas. Durante unos días estuve aprendiendo a practicar de esa manera y una vez lo conseguí, vaya¡ si hacía diferencia.

Espero con mucha ilusión este próximo programa, y aunque ya hemos experimentado y llevado a la práctica no pocas cosas con el Aprendizaje Experiencial, tengo mucha curiosidad por conocer las novedades de la DBM sobre aprendizaje y enseñanza efectivos.

Un abrazo,
Pilar

Unknown dijo...

Muchas gracias. El ejemplo viene muy a cuento. De hecho uno de los motivos de la utilidad del trabajo de Feldenkrais y la popularidad de "pilates" es la combinación de práctica con atención.
Si tomas el tiempo - y el esfuerzo - de aprender los patrones el resultado merece la pena.

Un abrazo
Tim