19/3/08

Una paréntesis no publicitaria

Después de ver como el software de google “blogger” me tragaba el 80% de mi post más reciente, he decidido no volver a escribir directamente “on-line”. Lo que sí estoy haciendo es redactar con un programa de reconocimiento de voz.
Se trata del “Dragon Naturally Speaking” versión 9 de la empresa Nuance. Te permite dictar al ordenador y, por tanto, ir mucho más rápido de lo que normalmente irías (160 palabras por minuto a mi me parece alucinante). Lo “entrenas” para reconocer tu voz y tu acento y luego vas “enseñándole” sobre la marcha. Con el uso llega a acertar más de 99%. Información en http://www.nuancestore.com.
Yo tengo la versión “preferente” porque ofrece la posibilidad de trabajar con Excel y navegar pero para solo texto (por ejemplo en Word) la versión “standard” basta y sobra. La verdad es que da gusto poder recomendar algo sin reservas.

2 comentarios:

Alejandro dijo...

Hola

Conozco este programa desde hace tiempo, pero nunca me he decidido a usarlo, sobre todo porque me pregunto hasta qué punto influye dictar a la hora de organizar un discurso.

Es decir, ¿es lo mismo escribir que dictar a la hora de expresar ideas?

Yo creo que no, principalmente por eso creo que prefiero escribir (aparte de que escriba razonablemente rápido). Escribir me permite reflexionar, elaborar más lo que quiero expresar, pero estoy seguro que hablando en voz alta, o dictando podría llegar a conseguir los mismos resultados. Todo será probarlo.

¿Cómo fue tu transición en este sentido? ¿Notaste diferencia entre dictar y escribir o no es algo relevante en términos de pensar?

Un saludo

Alejandro

Tim Ingarfield dijo...

Hola Alejandro
Gracias por tu respuesta.
Efectivamente, es diferente. Quizá en esto reside la primera cuestión de la transición. Soy más consciente de los beneficios en potencia de los dos modos de "redactar". Hay ciertos estilos de interactuar con el programa que no me resultan muy operativos y el que peor resulta es lo que podría llamar "dictar" en el que me encuentro hablando al vacío. Yo paso gran parte de mi vida profesional "en modo de hablar" - haciendo formación, intervención terapeútica, coaching, conferenicas etc. - y cada ejemplo de esto requiere una organización algo diferente. Al aplicarlo al uso de la DNS, los que mejor resultan son "charla confidencial" , "dejarse llevar" y "responder a alguien". Más formalmente exigente es el modo "hacer formación" que requiere de "coloque, descoloque, recoloque" etc. pero la disciplina que impone es útil también.
Espero que esto, aunque somero sirva para algo.
Tim